Eduardo Archanco para Applesfera
Lo que sí se mantiene como una constante es la fijación de Apple por preocuparse no sólo de cómo luce el exterior de sus equipos, sino también de cómo son por dentro. En este artículo comparamos el interior de un MacBook Pro de 13 pulgadas de 2016 con Touch Bar con diferentes modelos de la competencia de los últimos dos o tres años.
Esto es parte del legado de Steve Jobs que se mantiene al día de hoy.
Que Steve Jobs prestaba una atención inusual al interior de sus máquinas tiene que ver con su niñez. A su padre le gustaba reparar coches y crear toda clase de muebles para la casa. Y lo hacía con un cuidado y dedicación especial donde, por ejemplo, utilizaba maderas buenas en las partes que no se ven en un armario.
Donde unos utilizaban madera de peor calidad o más fea, él utilizaba la misma que en el resto del mueble. Esta fijación por “lo que no se ve” se le impregnó a Steve Jobs, trasladándolo años después a la compañía que creó a finales de los 70.
Esta obsesión por los detalles, así sean visibles o no, se ven hoy en día en pequeñas cosas que se van descubriendo. Y no sólo en hardware sino también en software.
Cosas como el recordatorio de donde estacionaste el auto al bajarte del mismo. O las sugerencias de Siri -mucho más inteligentes en iOS 12- donde al ver una reunión en tu calendario te sugiere activar “No molestar” mientras esa reunión dure, son detalles que hacen y marcan la diferencia de iOS.
O el force touch que podes hacer sobre el teclado para poder mover el cursor libremente. Son pequeños detalles pero muy potentes.
Y macOS también tiene lo suyo con atajos o funcionalidades que al usarlas pensás que tienen todo el sentido del mundo. Y si no las usas igual te das cuenta que macOS es igualmente diferente a otros sistemas operativos. Igual que sucedía seguramente con los muebles del padre de Jobs.
Ni que hablar del nivel de detalle del Apple Watch con el nivel de precisión admirable en sus componentes. Lo mismo sucede con la Macbook Pro. La fuerza necesaria para abrir la pantalla es la justa y necesaria para hacerlo con un dedo y sin que se levante la parte de abajo al abrirla. Pequeños detalles que hacen la diferencia.