Hoy tuvimos que arrancar temprano porque hicimos una excursión de rafting en el río Chimehuin, que nace del lago Huechulafquen.
La empresa que elegimos para hacer la excursión de rafting fué Pomelos Rafting y la verdad es que toda la experiencia fue muy recomendable.
De San Martín de los Andes, nos fuimos a Junín de los Andes en nuestro propio vehículo. Ya habíamos quedado con la empresa que nos juntábamos a las 10 en la AXION Energy para luego hacer caravana con ellos y el resto de la gente que se sumaba a la excursión. Era importante estar puntuales.
De ahí, fuimos por la ruta 61, bordenado el río hasta llegar a una base donde nos dieron el equipo y las instrucciones técnicas. Partimos luego en una Traffic hasta un mirador donde nos comentaban que se recrea el escudo de Junín de los Andes con el lago, la Araucaria, y el volcán Lanín.
De ahí, volvimos a la Traffic para que nos lleven al punto de origen de la excursión donde nos repartieron según grupo familiar en los diferentes botes y el guía (Joaco, un crack) nos acomodó según el peso.
La excursión en bote dura aproximadamente una hora y media. Entre el viaje, la foto en el lago, la excursión y la vuelta, se van unas 4 horas mas o menos.
Toda la parte de la excursión es sencilla, recomendable para ir con chicos de cualquier edad pero mayores de 5 años. Habían un chico de 5, 6 años y una señora de más de 65. Nada impidió que puedan hacerla.
Por momentos hay algunos rápidos tranquilos donde los chicos se divertían como locos.
En un momento todos nos tiramos al agua y nos dejamos llevar por unas corrientes para luego volver a subir al bote. También practicamos como subir a una persona sin demasiado esfuerzo.
Más adelante, ya casi al final, nos trepamos a unas piedras y nos tiramos desde diferentes alturas.
No saqué fotos pero si grabé con una GoPro Max (360º) y edité el video para que quede el recuerdo.
No recomiendo llevar un celular durante la excursión porque es posible que se caiga al agua o se golpee con alguna piedra. También es recomendable algún calzado acuático pero no Crocs ni ojotas. Tiene que ser algo que permita caminar en el agua y no se salga. Yo compré un calzado en el centro por algo más de 25 dólares. Toda esta info igual te la dan los de la empresa de rafting.
Ya a la tarde descansamos en el hotel, paseamos por el centro y fuimos a cenar a Don Florencio Restaurant donde la especialidad son las carnes. Todo lo que probamos estaba muy bueno.
Cerramos la noche con un helado en la chocolatería Riche.